jueves, 23 de junio de 2016

Guión de la obra 'Peer X Solveig'

Por Santiago Sobrino


Nos ha resultado imposible encontrar alguna adaptación de la obra 'Peer Gynt', de Henrik Ibsen, para que la pudieran representar y entender alumnos de Educación Secundaria. Como no localizamos adaptaciones, tuvimos que hacerlo nosotros. Como quiera que creemos en la comunidad escolar y en el trabajo compartido, ponemos aquí el guión adaptado completo para que lo pueda utilizar cualquier persona que lo desee, profesores y profesoras inquietos, preferiblemente.
Pincha en más información para verlo, luego copias y pegas en un documento. ¡Mucha mierda! para los actores que lo representen, bien en carne y hueso, bien mediante marionetas, como hemos hecho nosotros.
Peer x Solveig
Basada en la pieza teatral “Peer Gynt”, de Henrik Ibsen (1866)
Música de Eduard Grieg (1843-1907)

Personajes:

NARRADOR/A
AASE, viuda de un campesino
PEER GYNT, su hijo
SOLVEIG, hija de labradores inmigrados
HELGA, hermana pequeña de Solveig
INGRID, novia rica
NOVIO, el herrero
CHICA vestida de verde
NIÑO DIABÓLICO, su hijo
REY DE DROVE, señor de la montaña y padre de la chica
GNOMOS, BRUJAS Y DUENDES
AVES NOCTURNAS
ANITRA, joven india
VIEJO FUNDIDOR
UN CABALLO BLANCO
……………………………………………………………………………………………

ACTO I

NARRADOR/A
En las montañas de Noruega vive Peer Gynt, un mozo mentiroso y fanfarrón. Un tío caprichoso, gallito, medio delincuente… Todo el mundo opina lo mismo de él.
Pero a él le da igual: sólo quiere disfrutar de la vida ¡Y ser libre como el viento!


ESCENA 1ª (Acto I- Cuadro1º)
NARRADOR, PEER, AASE
Bien entrada la mañana, Peer Gynt duerme subido en un abedul mientras los animales  andan a su lado. Abajo del valle hay una cabaña destartalada.

̶ TEMA DEL AMANECER ̶

NARRADOR
¡Mirad a Peer Gynt ahí tirado: sueña con fantásticas aventuras, rodeado de princesas! ¡Se imagina ser el rey del universo!

PEER
(Se despierta) Uhm, es hora de que vuelva a casa… ¡Qué hambre! Seguro que mi madre tiene algo, preparado para mí.

(Ni corto ni perezoso se pone en camino, dejándose olvidada la escopeta. Baja el sendero. En la casa aparece la madre, furiosa)

AASE
¡Valiente cazador! ¡Cubierto de andrajos, sin caza! ¡Y… sin escopeta! (Le pega con el rodillo de amasar el pan)

PEER
¡Ay, ay! (ríe)



AASE
¿Dónde está ese reno que íbamos a convertir en salchichones para todo el año? ¿Eh? (Se queda parada, mirándolo  fijamente)… ¿No sabes, so gandul? Ingrid se ha comprometido con el herrero. Se van a casar.


PEER
¿Qué? ¿Con ese imbécil? ¡Pero si Ingrid está loca por mí!

AASE
¡Pues “estaba”! ¡Se casan esta tarde, para que lo sepas!

PEER
(Engulle la rica comida que su madre le ha preparado. Luego se levanta de la mesa)
¡Me voy al pueblo!

AASE
¡Pero qué vas a hacer allí, pedazo de inútil!
¿Has visto las pintas que tienes para presentarte en una boda?
¡Perdiste esa oportunidad y se acabó! ¡No tienes nada que hacer!

PEER
¿Qué no tengo nada qué hacer…? ¡Eso se verá! (Sale riendo y dando un portazo)

AASE
¡Peer! ¡Sinvergüenza...! Peer… mi buen Peer (llora)


ESCENA 2ª (I-3)
NARRADOR/A, PEER, SOLVEIG, HELGA, NOVIO, AASE
Patio de la casa del rico del pueblo. Guirnaldas, mesas con comida, baile, música.

̶ TEMA DE LA BODA --

NARRADOR
Pues sí,  Peer Gynt, como cazador es una calamidad, pero como conquistador… ¡No tiene rival! Así que al llegar a la fiesta, sus ojos se encuentran con los de una chiquilla a la que nunca ha visto antes… Se llama Solveig, recién llegada al pueblo.

PEER
Hola ¿bailas conmigo?

SOLVEIG
Bueno…

HELGA
(Se acerca al poco, corriendo)
Solveig, que ha dicho mamá que vayas ahora mismo, y no sigas bailando con “ese”…

SOLVEIG
Me voy.



PEER
¡No le hagas caso a esa canija! Lo que pasa es que te avergüenzas, por las pintas que tengo.

SOLVEIG
¡Suéltame, estás loco! ¡Tengo que ir! (Sale corriendo. Se vuelve) No puedo seguir bailando, aunque… quisiera. (Se va)

PEER
¡Me gustas…! Bueno, ahora que lo pienso… ¡Yo he venido aquí a buscar a Ingrid! (ríe y sale corriendo)

NARRADOR/A
¡Así de veleta es Peer Gynt…! Encima, Ingrid está escondida en el granero,
llorando a moco tendido, porque no quiere casarse con el herrero. Cómo no: sigue enamorada de Peer Gynt… ¡Así que cuando lo ve aparecer, no duda un segundo y se echa en sus brazos!  Mientras, llega la madre de Peer a la fiesta…

AASE
(Con el bastón en alto)
¡Dónde está mi hijo, que se va a llevar una somanta palos!

NOVIO
(Aparece corriendo, tembloroso)
¡Que el demonio lo lleve, al infierno! ¡Padre, madre…! (llorando) ¡Peer se ha llevado a Ingrid!  ¡La lleva a hombros, como a una ternerita, la pobre, monte arriba!
¡¡A ese habría que ahorcarlo!!

AASE
¡No! ¡No! ¡Dios mío, protege a mi Peer!

NOVIO
¡Son… esos dos puntitos que se pierden en el bosque…! ¡¡Vamos!!



ESCENA 3ª (II-1)
NARRADOR/A, PEER, INGRID
En medio del bosque

PEER
(Jadeante por la carrera)
¡Ja, ja! Ya no nos ven… Venga, dame un beso…
Y ahora tú te quedas aquí, para que te recojan ¡Yo me largo!

INGRID
(Llorando y con el vestido roto)
¿Cómo, me vas a dejar así? ¡Tendremos que dar la cara, los dos juntos!

PEER
¡Ca! ¡De eso nada! Se acabaron las historias. Ala, vete con tu padre
¡Al diablo las mujeres…! ¡Todas! …menos una.

INGRID
Pero… ¿quién es esa una…?

PEER
¡Tú no! (ríe)

INGRID
Si te quedas, podríamos vivir bien.
¡Mis padres te perdonarían… y tienen mucho dinero!
PEER
¡Me río de tus padres y sus riquezas!

INGRID
¡Pagarás lo que has hecho!

PEER
¡Huy, qué miedo! Además has venido porque has querido. ¡Adiós!


ESCENA 4ª (II-5)
PEER, CHICA DE VERDE
Entre unas rocas escarpadas, el macizo de Rondane. Cae la tarde.

PEER
¡Uf, estoy molido! Llevo todo el día corriendo; tengo hambre.
Uhm… estas frutitas y aquellas setas tienen una pinta… interesante (las come).
Qué sueño me está entrando, qué mareo…

CHICA DE VERDE
Hola guapo, soy la hija del Señor de Drove, el Rey de la Montaña.

PEER
¡Qué casualidad! Me llamo Peer, y también soy hijo de la poderosa reina Aase.

CHICA DE VERDE
¿Y qué haces con esa ropa sucia y destrozada? …Compara con mis ropas de oro y seda verde.

PEER
¡Ja! ¡Tendrías que verme con la ropa elegante de los domingos con sus botones de plata! No esos musgos, que llevas tú encima  ̶ y que no te quedan nada mal, por cierto.

CHICA DE VERDE
(Sonríe)
Bah, no entiendes nada.
Si vinieras al precioso castillo de mi padre, igual solo verías rocas…

PEER
Lo mismo te digo: el palacio de mi madre hay quien lo ve… como una casucha asquerosa.

CHICA DE VERDE
(Echándosele al cuello)
¡Ay, Peer, creo que estamos hechos el uno para el otro!
¡Vámonos ahora mismo, en mi brioso corcel!
(Aparece un jabalí enorme y se montan los dos riendo)

PEER
¡Vamos a ese Salón del Trono del Rey de la Montaña!

NARRADOR
Como ya adivinaréis, el Salón del Trono resultó ser una fría, negra y siniestra gruta de la montaña ¡Podréis entonces imaginar cómo será la corte de un reino así…!



ESCENA 5ª (II-6)
NARRADOR/A, CHICA DE VERDE, REY DE DROVE, PEER, GNOMOS, BRUJAS Y DUENDES
Salón del Trono, en realidad una gruta en la montaña. El rey presidiendo la gran asamblea de duendes, gnomos, brujas… Entran los dos y descabalgan el jabalí

̶ TEMA DE LA GRUTA DEL REY DE LA MONTAÑA—

CHICA DE VERDE
¡Atención, atención! Traigo a mi prometido, el príncipe Peer.
¡Hoy mismo quiero la boda!

GNOMOS, BRUJAS Y DUENDES
(Gritando y golpeando cacerolas con los cuchillos)
¿Cómo nos lo comeremos? ¿Molido o cortado para estofado?

REY DE DROVE
¡¡Esperad un poco!! ¡Nuestros asuntos van muy mal!
Si caso a mi hija con este bruto, seguro que nos ayudará.
Vaya, vaya… joven: ¿así es que quieres casarte con mi hija?

PEER
Yo no he dicho eso… Pero ya que me lo pregunta…
¡Podría casarme con ella y obtener su reino como dote!
¡Soy un genio!

REY DE DROVE
Antes tienes que pasar la prueba de los duendes. Si fracasas, no saldrás vivo de aquí. Deberás olvidar el mundo de afuera, la luz del sol y la noche estrellada.

PEER
Un rey no echa de menos esas tonterías.

REY DE DROVE
Y, a ver ¿en qué se diferencian hombres y duendes?

PEER
¡En muy poca cosa! Pues, en ambos casos, los peces gordos, sacan tajada de sus víctimas. Y los pequeños, se muerden entre ellos un poquito.

REY DE DROVE
¡Ja, ja, eres muy listo! Te voy a decir una diferencia.
Entre las personas se dice: “Sé fiel a ti mismo”; pero entre los duendes: “Vete a tu bola”.
¡Así que esa tiene que ser, a partir de ahora, tu norma suprema!

PEER
¡Para mí eso no es nuevo!

REY DE DROVE
¡Perfecto!
Además, fíjate ¡nuestras vacas dan pasteles y nuestros cerdos dan miel!
Tienes que familiarizarte con nuestros manjares (le ofrece un cuenco)

PEER
¡Puaj! ¡Pero esto es vomitivo!

REY DE DROVE
¡Recuerda: si comes del plato obtendrás a mi hija!

PEER
Tal vez… a la larga, me vaya… gustando
(Lo traga tapándose la nariz y luego tose)

REY DE DROVE
¡Mucho mejor! Anda, sécate los sudores y no escupas tanto.
Bueno, ahora toca hablar de tu ropa: lo importante es el lazo del rabo.

PEER
¿Quée? ¡Yo no tengo rabo!

REY DE DROVE
No te preocupes, tenemos aquí unos rabos postizos monísimos.
Así serás un heredero al trono mucho más… respetable. Y con lazo amarillo, de la más alta categoría.

PEER
En fin, dicen que hay que adaptarse a las costumbres de cada país:
“donde fueres haz lo que vieres”.
¡Ponedme “esa cosita”, si os empeñáis!
(Se lo ponen. Suena una música espantosa y danzan dos seres deformes)

REY DE DROVE
¿Qué, bonito eh? ¿Te gusta?

PEER
Hummm… Me parece asqueroso. Es como… ver una vaca en ropa interior, rascándose los cuernos con las pezuñas, mientras una chona en calcetines se pone a hacer cabriolas.

CHICA DE VERDE
(Llorando)
¡Cómo dices eso…! ¡Éramos mi hermana y yo las que tocábamos y bailábamos…!

REY DE DROVE
¡Qué extraña es esta naturaleza humana…!
Hijo mío ¿no has bebido nuestra miel, y has aceptado nuestra cola con gusto…?
¡Ya lo tengo! Creo que eliminaré el hombre que hay en ti ¡Debo curarte!
¡Ahora mismo: sacadle los ojos, para que nunca nada le parezca feo!

PEER
Creo que me voy… Yo aquí no me quedo…

REY DE DROVE
Imposible, el que entra en mi castillo, no sale. Además tenemos la boda.

PEER
Dirás “la broma” ¡Abridme la puerta!

REY DE DROVE
¿Cómo, te burlas?
¡¡Mis súbditos: estrelladlo contra las rocas!!


GNOMOS, BRUJAS Y DUENDES
¡Antes queremos jugar con él al ratón y al gato!
¡Yo quiero cortarle un dedo!
¡Pues, yo quiero arrancarle las orejas!
¡Yo, darle un bocado en la nariz!

PEER
Estoy perdido ¡Socorro, madre!
(Se oyen campanas a lo lejos. Oscuridad. Peer queda solo)


ESCENA 6ª (II-7)
PEER, NARRADOR/A, AVES NOCTURNAS
Oscuridad total.

PEER (blandiendo una rama grande)
Responde: ¿quién eres?

NARRADOR/A
Yo mismo. Y tú ¿puedes decir otro tanto?

PEER
…Diré lo que quiera. Aparta que te doy… (Golpea al vacío y cae)
¿…Quién eres?

NARRADOR/A
Soy yo mismo, el Gran Torcido. Date media vuelta, Peer.
PEER
Aparta que te doy (Da puñetazos en el aire)
No hay manera, no puedo pasar… Deja que te vea. ¡Hiéreme si quieres!

 NARRADOR/A
No soy tan tonto. Te venzo sin luchar
(Se oye un ruido muy fuerte de batir de alas)

AVES NOCTURNAS
¡Venid, volemos en círculo sobre él!

PEER
¿Dónde estarás, mi Solveig? ¿Puedes… ayudarme? (Cae sin fuerzas)

AVES NOCTURNAS
¡Ya lo tenemos!

NARRADOR/A
No, no podemos con él…
Alguna mujer lo protege ¡es demasiado fuerte!








ESCENA 7ª (II-8)
PEER, HELGA
 Amanecer en la montaña delante de una cabaña solitaria. Peer duerme junto a la puerta cerrada. Helga se acerca.

PEER
(Se despierta)
Qué mal sabor de boca… puaj…
¡Pero cómo! ¿Qué haces tú aquí?

HELGA
Te traigo este cesto de comida, de parte de Solveig. Dice que no quiere verte

PEER
¿No sabes? Casi quedo prisionero del Rey de la Montaña y su hija…

HELGA
Solveig ya lo sabe, ella hizo sonar las campanas para que escaparas. Adiós.

PEER
¡Espera! Toma este botón de plata. Dile, de mi parte… que no me olvide.
(Helga sale corriendo)


ESCENA 8ª (III-3)
 PEER, SOLVEIG
Cabaña en el bosque nevado. Peer está clavando maderas sobre la puerta.

PEER
Hay que poner estas trancas para que no pasen esos enanos, que te clavan las uñas cuando duermes ¡Esos demonios!

SOLVEIG
(Aparece caminando con un hatillo en la mano)
Como preguntaste por mí, vengo.

PEER
¡Solveig! Pero… ¿y tus padres?

SOLVEIG
(Llorando)
Los he dejado a todos, para estar contigo.

PEER
¿Sabes que me persigue la justicia?
¿Que tengo que vivir en el bosque… en esta choza?

SOLVEIG
No vengo contigo por los lujos… ni las herencias (ríen)

PEER
¡Entonces fuera clavos y tablones! ¡Si estás tú, se acaba el miedo a los gnomos y las brujas!  Y…bueno, tendré que hacer una cabaña mejor ¡La empezaré de nuevo! (ríen)


ESCENA 9ª (III-3)
PEER, SOLVEIG, CHICA DE VERDE, NIÑO DIABÓLICO
Han pasado unos meses, Peer está cortando leña. Aparece la Chica de Verde, trasformada en una bruja, con un niño diabólico que lleva un jarro.

CHICA DE VERDE
Hola Peer… ¿Qué pasa, no te acuerdas de mí?
¿En solo unos meses has olvidado tu compromiso en el castillo de mi padre?

PEER
Yo siempre olvido lo que no ha sucedido. Me voy… tengo prisa.

CHICA DE VERDE
¡Ja! Querido, siempre tienes prisa… (Dirigiéndose al niño) Anda, dale a beber a tu padre

PEER
(Petrificado)
                            ¿Quée? ¡Estás loca, vieja bruja! ¡Lárgate ahora mismo!

CHICA DE VERDE
Ya quisieras ¿…No montaste conmigo en el jabalí…?
Además vamos a ser vecinos… Y que sepas que visitaré a los dos tortolitos:
Cada día exigiré mi parte de amor… Ah, también traeré al nene…
Anda, di adiós a papá… (el Niño Diabólico escupe y le tira el agua del jarro en los pies) ¡Hasta pronto!

PEER
¡Uf! No hay remedio ¡Por haber hecho tanto el idiota!
Ya me dijo el Gran Torcido: “¡Date media vuelta, Peer!”
No puedo quedarme con Solveig, todo esto sería… demasiado asqueroso.
Adiós Solveig… no te merezco. (Deja caer el hacha)

SOLVEIG
(Desde la cabaña)
¡Peer…! ¿Te queda mucho? ¡Si quieres voy a ayudarte!

PEER
¡No, ten paciencia! ¡Tendrás aún que esperar…!

SOLVEIG
¡Tranquilo, esperaré lo que haga falta!

(Peer sale corriendo y se interna en el bosque)


ESCENA 10ª
AASE, PEER.
De noche, interior de la cabaña de Aase. Ella está en la cama, enferma. Entra Peer silencioso.
̶ TEMA DE LA MUERTE DE AASE—

AASE
(Se incorpora un poco. Voz apagada)
Por fin llegas, hijo mío… Ay Peer, mi vida se termina…
Pero… y cómo te atreves a venir… Si te cogen te matarán.

PEER
¡Bueno madre…! Vamos a hablar de otras cosas…

AASE
Hay una chica, cerca de aquí, que te echa de menos.

PEER
(Incómodo)
Ejem… ¿Y qué tal… las cosas por el pueblo?

AASE
¿…No me preguntas quién es esa chica?

PEER
¡Anda! ¿Te das cuenta de que esta es mi cama?
¡Ja! donde jugaba de pequeño al trineo.
El gato era el caballo…

AASE
Sí Peer. Y ahora quiero ya marcharme. Tengo un viaje pendiente.
¿…Me quieres llevar en tu trineo?

PEER
¡Venga! ¡Vamos a la fiesta, en el palacio de las hadas!
¡Estamos invitados!

AASE
Ya se ven las luces… Parece que me llaman…
 (Peer gesticula como si llevase unas riendas y azuzara al caballo)

PEER
¡Soo…! ¡Ya llegamos!
(Hablando con alguien invisible)
“No, yo no quiero ahora pasar, esperaré fuera. Solo mi madre. La mejor de todo el valle”
(Se vuelve a Aase, que está inmóvil)
¿Verdad que es… precioso? ¿Madre… por qué me miras así?
(Se acerca, le cierra los ojos y le besa la frente)
… Ya puedes descansar.
(Se dirige a la puerta. Suspira)
Adiós madre. Pronto llegarán los vecinos, escapo sin hacer ruido…



ACTO II

ESCENA 1ª (IV-4)
NARRADOR, PEER, ANITRA, BAILARINAS

̶ TEMA DE ANITRA ̶

NARRADOR
Peer Gynt, marchó muy lejos, huyendo de su país. ¡Llegó hasta la India! Pero se metió en líos y más líos. Hasta en negocios… sucios. Y se hizo muy, muy rico…
¡Vamos, un desastre! ¡Como uno de esos tipos que salen en la red, chuleándose!
…Pero se está haciendo viejo.
Ahora ha conocido a una tal Anitra, bailarina oriental. Y se nos ha quedado colgao: ¡veréis cómo se le cae la baba!

PEER
(Luna llena. Jardín oriental, música. Un caballo blanco. Peer está vestido con turbante y pluma, contemplando a la bailarina.)
Ay Anitra, mi hermosa Anitra. Estás buenísima, digo monísima.
¡Qué joya, qué bien bailas!

ANITRA
Calla bobo, déjate de tonterías ¡que me haces perder el compás!

PEER
Porfa,  Anitra, vente a mi palacio de cristal. Te mimaré.
¡Brillarás en mi harén como una perla!

ANITRA
(Sin parar de bailar)
¿Síii? ¿Como… esa que llevas colgada del cuello? ¡Pues venga, dámela…!
Y la esmeralda del turbante. Y también ese broche de rubí… y esa pulsera de topacio.

PEER
(Dándole todo y suspirando)
Ay Anitra, mi dulce Anitra… Vamos, para ya.
Cogemos este blanco corcel, y volaremos hasta el mar.
Allí nos espera mi yate… ¡Recorreremos el mundo! ¡Tú y yo!

ANITRA
Ya no tienes palacio, ni yate, so tontito. Me los regalaste… ¿Ya no te acuerdas?

PEER
Anitra, Anitra, qué mala has sido ¡Me lo has quitado todo!

ANITRA
Ah, el caballo también está a mi nombre… (Se monta)
¡Muchas gracias y ahí te quedas! ¡Adiós!

PEER
Uhm, creo que me estoy haciendo viejo. Ya es hora de irme volviendo…
Me cojo el primer barco a casa.



ESCENA 2ª (V-1, 7 y 9)
NARRADOR/A, PEER, VIEJO FUNDIDOR.
Noche, ruido de las olas del mar.
̶ TEMA DE LA TEMPESTAD ̶

NARRADOR/A
Peer llegó hasta su país, pero nadando: una espantosa tempestad hundió el barco.
¡Y lo dejó medio muerto en la playa, entre unos maderos!

PEER
(Aún tumbado en la arena)
Casi doy de comer a los peces…
Estoy medio muerto, pero agradecido a ese cocinero del barco… 
que me dejó el tablón para mí solo. Allá abajo estará descansando… el pobre.

VIEJO FUNDIDOR
(Llega con su caja de herramientas y su crisol)
¿Es usted el señor Peer Gynt?
Estaba buscándolo, porque necesito fundir plata para hacer nuevos botones.

PEER
¿Pero qué me dices? ¿Plata, botones? ¿Y yo qué tengo que ver?
¡Estás completamente loco!

VIEJO FUNDIDOR
No, caballero. Ya todo se ha terminado.
Voy a meterlo en mi crisol y volveré a fundirlo, a usted.
¡Así de sencillo!

PEER
¿Pero no ve que acabo de salvarme de un naufragio?
Mire cómo estoy… enredado de algas.
No puede ser… seguro que es un error.
¡Además así, sin avisar!

VIEJO FUNDIDOR
…Tampoco se suele decir la fecha a los que van a nacer…
En todo caso, como no ha sido peor que muchos, todo irá muy rápido.
A ver, me explico: a usted le gustaba fundir la plata, para hacer los botones (como el que regaló a  esa niña… Helga) de los trajes de fiesta… ¿verdad?
¿Y qué hacía con los que no salían bien?

PEER
Pues volverlos a echar al crisol ¡Qué tontería!

VIEJO FUNDIDOR
Pues eso es lo que haré contigo: eres un botón defectuoso,
que no serviste para abrocharte ni a ti mismo.
¿Ahora comprendes?

PEER
¡Por favor! ¡Mira que si te equivocas, y luego resulta que me merezco otra cosa…!
¡Ya está! Dame un plazo, para demostrarte que valgo un poco ¡Buscaré testigos!

VIEJO FUNDIDOR
Bueno, de acuerdo. Nos volveremos a ver. ¡Entonces ya no habrá más excusas!
(El anciano se marcha, perdiéndose en la oscuridad. Ruido de olas)




ESCENA 3ª (V-10)
PEER, VIEJO FUNDIDOR, SOLVEIG
Final de la noche en el bosque. Peer camina pensativo. Aparece el viejo fundidor

VIEJO FUNDIDOR
¿Qué? ¿Consiguió usted un testimonio que demuestre la calidad de su botón?

PEER
¡Uf! ¡Vaya susto que me has dado!
No… digo… ¡sí!... Bueno…

VIEJO FUNDIDOR
Entonces… ¡al crisol!

PEER
¡Espera… mira…!
¿Qué será aquella luz de allá detrás?
Una cabaña…
¡Creo que ya tengo a alguien que me echará un cable!
(Corre hacia la lucecilla y el viejo lo sigue. Comienza a clarear el cielo.)

VIEJO FUNDIDOR
(Lo acompaña un poco y luego se para)
Bueno, vale, será mejor que me vaya… Por el momento…
(Se pierde en la espesura del bosque)

SOLVEIG
(Sale de la cabaña, tarareando la “canción de S.”)
¡Anda! ¡Qué bien, Peer, ya has vuelto! ¡Empezaba a preocuparme!
…Como no traías la leña, fui yo a coger…
Bueno, no importa. Tengo ya caliente el desayuno, todo está preparado.
Te dejo para ti fregar luego. También… hacer la cama, y el baño.

PEER
¡Ah, Solveig! Tú sí que me convienes…
¡Cómo me gustas, igual que en el baile… de aquella boda boba!
¡Por qué habré hecho tanto el imbécil!

SOLVEIG
(Como distraída,  sin darle importancia)
Luego tengo que salir.
Lávate lo primero, corazón. Hueles fatal… Como a roña, a pescado…
Y no sé… a plomo fundido.

PEER
¿Entonces dónde he estado todo este tiempo?

SOLVEIG
Tú sabrás… Yo, un rato esperando a que volvieses de por leña.

PEER
¡Eres mi reina, mi palacio de cristal! ¡Mi perla, mi topacio, mi… ¡Mi ojal!

SOLVEIG
…No entiendo lo que dices, cariño.
Bueno, ya me lo irás contando… Vengo en un rato, que he quedado.

(Mientras sale, Peer la mira extasiado. Ella tararea la “canción de S.” que se funde con la grabación)


̶ CANCIÓN DE SOLVEIG ̶





























 








 

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